El «segundo sexo» irrumpe en el ambiente científico

Desde la obra fundacional del movimiento feminista, El segundo sexo de Simone de Beauvoir, hasta Investigaciones actuales de las mujeres y del género, han pasado más de 60 años, pero la historia sigue siendo la misma. La Universidade de Santiago presentó ayer el segundo de los títulos bajo los auspicios del Centro Interdisciplinario de Investigacións Feministas e de Estudos de Xénero, el Cifex.

El libro, en palabras de la directora del centro dependiente de la USC, Rita Radl, pretende contribuir de manera decidida a la incorporación de los estudios de género al contexto científico general. Investigaciones actuales de las mujeres y del género es la primera publicación de, Cifex, que comenzó su andadura en el año 2006 y que decidió verter parte de su trabajo en las páginas que ayer vieron la luz.

Estructurado en un total de cuatro partes, el volumen que ayer se presentó aborda temas de teoría y epistemología en sus primeras páginas, que justifican la necesidad de renovar las ciencias humanas para que incorporar la perspectiva de género. La participación laboral y de género ocupa el segundo de los apartados, mientras que el tercero aborda la lacra de la violencia machista desde una perspectiva «interculturamente diferencial». Finalmente, se incluyen una serie de textos que inciden de manera especial en la importancia de las condiciones de socialización para conseguir la transformación de las estructuras sociales y conseguir una mayor integración femenina.

En la presentación también participó el rector de la Universidade, Juan Casares Long, que explicó que el servicio de las universidades a la sociedad va más allá de la formación de profesionales competentes, si no que se basa también en «servizos intanxibles» como el que presta esta publicación, que según Casares, pone sobre la mesa el interés de la Universidade por las problemáticas de la sociedad actual.

Reforzar estudios

La secretaria xeral de Igualdade de la Xunta, Marta González, se mostró convencida de la necesidad de «reforzar estes estudos nas universidades», puesto que juegan un importante papel como instituciones educadoras y transmisoras de valores.

En la misma línea se expresó Juan Blanco, director del Servizo de Publicacións e Intercambio científico de la USC, quien calificó a las universidades de agitadoras de conciencias en temas referentes a las perspectiva de género que aparecen casi a diario en los medios de comunicación, como puede ser la violencia contra las mujeres.