Madrid, 03 marzo. 15. AmecoPress. Podemos presentó ayer un informe sobre economía y cuidados, solicitado a las economistas María Pazos y Bibiana Medialdea. El documento propone varias transformaciones que van más allá del campo económico y que están inspiradas en el feminismo. Ahora toca debatirlo.
Con este documento se propone abrir un intercambio en torno a la necesaria reorganización del sistema de cuidados. Además de un diagnóstico del sistema actual y una explicación razonada de los aspectos que exigen su urgente reforma, el trabajo incluye los elementos básicos que debieran conformar el nuevo sistema de cuidados, así como las medidas necesarias para su implementación.
Entre las medidas que defienden en el trabajo destacan: permisos de paternidad y maternidad iguales e intransferibles, sistema de dependencia garantizado, educación infantil universal, equiparación los derechos de las empleadas del hogar a los del resto de las personas trabajadoras y jornada laboral de 35 horas semanales.
Las autoras basan su propuesta en tres principios: el de solidaridad -a cada cual según sus necesidades y los riesgos deben cubrirse colectivamente desde el sistema público de protección social de tal forma que todas las personas tengan asegurados sus derechos-, el de capacidad -todas las personas deben contribuir en función de su renta y de su disponibilidad- y el de la ciudadanía universal e individualización de derechos y deberes –que todas las personas deben ser independientes económicamente durante toda su vida y deben gozar de igualdad de oportunidades en todos los ámbitos-.
Autonomía funcional plena
Proponen la implementación de un sistema de dependencia universal, que proporcione la autonomía funcional plena, cuya implantación sería progresiva y eliminaría el artículo 18 de la Ley de Dependencia que prevé la prestación por cuidados en el entorno familiar.
Con ello se responde al sistema actual que es, según el texto, “fuente de desigualdades: las mujeres, sea cual sea la estrategia por la que opten para hacerse cargo de “sus” tareas de cuidados, se ven negativamente afectadas tanto en el ámbito del hogar como en el del empleo”.
Frente a este modelo, se apuesta por dar un nuevo significado determinados conceptos: “la autonomía funcional es un derecho básico que todas las personas deberían tener asegurado por parte de los servicios públicos sin depender de otras personas. Por otro lado, nadie debería sentirse presionado a abandonar su empleo para proporcionar cuidados de larga duración. Además, ninguna categoría laboral debería estar fuera de los derechos básicos. Finalmente, las personas deberían tener tiempo para proporcionar a sus familiares dependientes afecto y cuidados, voluntariamente y sin sacrificar su propia vida”.
Otra de las propuestas del documento llamado ‘Reorganizar el sistema de cuidados: condición necesaria para la recuperación económica’ es equiparar las empleadas de hogar al resto de personas trabajadoras.
Maternidad y paternidad
En cuanto a la maternidad y paternidad, las autoras proponen la equiparación de los permisos de maternidad y paternidad: el aumento del permiso de paternidad de las dos semanas actuales hasta las 16 semanas que ya tienen las madres se haría progresivamente. Los permisos serían intransferibles, “como son todos los demás derechos laborales y sociales”, y pagados al 100%. La maternidad y la paternidad tendrían también la misma protección frente al despido.
Y es que, según las autoras del documento, el sistema actual, centrado en el cuidado en el hogar, “provoca una dualidad muy perniciosa en el mercado de trabajo: para algunas personas -sobre todo hombres- jornadas interminables y para otras -sobre todo mujeres- empleo precario a tiempo parcial, subempleo, interrupciones que impiden un reingreso laboral en buenas condiciones, pérdida de derechos sociales, etc”.
El sistema que ellas proponen, basado en el reparto igualitario de los cuidados entre hombres y mujeres, en jornadas cortas a tiempo completo –una de las claves del modelo que defiende el documento es la jornada laboral máxima de 35 horas semanales- y en la universalización de los servicios públicos –entre otras cosas, se propone declarar el derecho universal a la educación infantil pública y gratuita desde los cero años-, contribuiría a resolver estos problemas de eficiencia y equidad.
Voluntad política
El documento de Pazos y Medialdea incluye algunas cifras para avalar la viabilidad de estas reformas. Las expertas aseguran que la ampliación de la protección social, la reducción de la pobreza y la economía sumergida, favorecer el consumo privado y mejorar la eficiencia económica son cornisas que pueden sostener económicamente el cambio de prioridades propuesto. También esgrimen buenos resultados de medidas adoptadas en los países nórdicos. De este modo, dejan claro que el principal requisito para darle la vuelta a la situación actual es la voluntad política.
“Las medidas que se proponen no son medidas aisladas unas de otras sino complementarias y con gran impacto conjunto. Los gobiernos se han limitado a reconocer su necesidad a cuentagotas, pero no han dado los pasos para realizar las reformas oportunas. La oportunidad es única para una reorientación ilusionante, que necesariamente debe estar basada en un debate social”.
“Si en el siglo pasado el gran paso fue la creación de los estados de bienestar, hoy el salto necesario y movilizador de la sociedad es la ampliación de la protección social a todas las personas y necesidades, con una apuesta radical por la igualdad”.
Campaña
Tras la presentación del documento Podemos aborda esta semana el segundo hito vinculado al 8 de marzo. Ese día, además de participar en las movilizaciones allá donde se realicen, se lanzará un mensaje más específicamente político: el cambio democrático que queremos debe llegar hasta el tuétano de la vida cotidiana, también a las relaciones de género; las mujeres tienen un papel político fundamental en el cambio. El lema de la campaña es “Es ahora y con Nosotras”
Foto: archivo Amecopress