Asunción Bernárdez Rodal es doctorada en Periodismo, licenciada en Filología Hispánica y profesora titular de Comunicación y Género, Semiótica de los Medios de Masas y Teoría de la Información, asignaturas impartidas en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Actualmente, también dirige el Instituto de Investigaciones Feministas de la UCM y coordina el Programa de Doctorado en Estudios Feministas y de Género.
AmecoPress ha hablado con Asunción B.R quien también publicó el pasado mes de mayo de 2015 el libro ‘Mujeres en medio (s). Propuestas para analizar la comunicación masiva con perspectiva de género’. Asegura que el objetivo del libro es lograr que aquellas personas que estudian o se van a dedicar profesionalmente a los medios de comunicación entiendan la importancia que tiene la aparición de los géneros de forma equitativa, tanto hombres como mujeres.
Contenidos del libro
En mayo de 2015 publicó un nuevo libro ‘Mujeres en medio (s). Propuestas para analizar la comunicación masiva con perspectiva de género’, ¿qué nos cuenta en él?
Pretende ser un libro que de herramientas para poder aplicar la perspectiva de género en los medios de comunicación. Es un libro que sirve tanto a las personas que trabajáis en los medios de comunicación como a las personas que quieran iniciarse en la investigación. Hace un recorrido de los medios generalistas más importantes, por ejemplo se habla de cine, se habla de televisión, se habla de prensa, de nuevas redes y se habla un poquito de ciberfeminismo también, de las nuevas formas de comunicar a través de la red,…etc.
¿Cuáles son los principales errores que se cometen en prensa a la hora de dar información?
El fallo principal es que la presencia de las mujeres sigue estando en relación con la de los hombres, es decir, no hay una presencia pública de las mujeres por sí mismas, representadas de una manera que se corresponda con la realidad social que ya existe. Por ejemplo, hay muchas mujeres en cargos importantes, en la política, hay muchas mujeres en definitiva en la vida pública. Los medios reflejan esta situación de una manera ‘poco natural’, no hay una paridad a la hora de tratar a hombres y mujeres en la información.
Es muy común que cuando hablamos de información, los periódicos y la prensa en general, continúan haciendo alusiones a la vida privada de las mujeres, a cómo visten, si son mujeres de o hermanas de. Otra cuestión fundamental es que a las mujeres se les trata como víctimas, aparecemos en las noticias muchas veces para ilustrar desde las guerras hasta las catástrofes naturales. Y otro gran problema es el de los y las expertas, es decir, cuando los y las periodistas requieren testimonios de gente experta casi siempre son varones aunque esa búsqueda de testimonios se produzca en medios que son altamente feminizados. Por ejemplo, la biotecnología hoy día es un campo que está muy feminizado y aún así los y las periodistas tienden a pedir opiniones de varones. Esto ocurre porque detrás se esconde un sistema que nos dice que las voces masculinas tienen más legitimidad para hablar, una cosa muy antigua y que se practica de manera inconsciente.
En el libro también habla de la publicidad, ¿qué tratamiento recibimos las mujeres en este campo?
La información es un peligro cuando hay una mala representación de género porque se supone que en la información tú hablas de la realidad. En la publicidad todos y todas pensamos que lo que pasa allí es mentira y, en principio, no nos la creemos. Sabemos que la publicidad es un mundo imaginario y que no tiene que ver con la realidad. Lo curioso es cómo la publicidad es un caso donde vemos la estereotipación de los géneros con una claridad enorme, porque vemos como muchos hombres siguen siendo representados por los valores tradicionales que se les da, es decir, que son fuertes, dominantes, y a las mujeres también se les muestra con una representación muy tradicional, que son las dominadas, tienen que ser las guapas.
Por poner un caso práctico, en una fotografía en la que se ve a una pareja, observamos que el hombre está con una postura erguida y ella más por debajo, él mira a la cámara y la mirada de ella está perdida. Hay una forma de construir el género que, aún sabiendo que es imaginaria, refleja los estereotipos de género que hay fuera de la publicidad, solo que los vemos exagerados. Hay que decir que la publicidad también es un medio que, en principio, no quiere ofender a nadie, intenta no ser sexista, pero la gente que trabaja en publicidad no se da cuenta de que lo está siendo.
En un anuncio de los años 60 podíamos ver cómo una mujer le pone las zapatillas a su marido o el hombre le pega una bofetada a su mujer porque la comida está fría. En este sentido, la publicidad actual es mucho menos machista, pero no es del todo igualitaria porque está encasillada en los roles tradicionales.
¿Por qué habla de ciberfeminismo en el libro?
Porque para las mujeres ha sido una gran esperanza el tema de Internet, porque ha permitido que surjan nuevos medios como, por ejemplo, el mismo AmecoPress que es una iniciativa que quizás no se hubiera llevado a cabo sin los nuevos avances tecnológicos que tenemos ahora. Es muy importante que las mujeres conozcan todas las alternativas de Internet, tenemos que estar ahí, en el tema de las redes sociales, porque ahora es el mundo que hay. Toda esa visibilidad que ofrece Internet es muy importante para que el mundo cambie y, sobre todo, para que las representaciones de hombres y mujeres acaben siendo cada vez más igualitarias.
Violencia de género
¿Cómo se deben abordar adecuadamente los múltiples casos de violencia de género en los medios de comunicación?
Creo que el movimiento feminista ha trabajado muchísimo en España. Actualmente no se está dando una mala información sobre ese tipo de casos en nuestro país. Es una información que se tiene que hacer sin espectacularizar la situación, siempre se dibuja a las mujeres como víctimas porque muchas veces no se dice qué hizo esa mujer positivo antes de ser asesinada, qué hizo en su vida anterior, ha podido denunciar, ha podido hacer muchos actos positivos en contra de la agresión. En la prensa se comunica muy rápida la información, esos aspectos se tienden a olvidar.
Una crítica que están haciendo también las autoras que trabajan en estos temas es el problema de que las víctimas nos llegan como una simple cifra, alrededor de 60 en este último año. Son noticias que ocupan un lugar pero que luego se olvidan, por eso es importante que se trate correctamente, que se tomen medidas adecuadas, que se tengan recursos para que las mujeres víctimas de violencia de género obtengan apoyo social y económico. Considero que en la actualidad la prensa no está tratando tan mal este tema como se trataba hace 20 años y ha sido positivo el cambio.
Problemática de la desigualdad de género
¿En qué ámbitos de la sociedad aún existe mayor desigualdad de género?
Prácticamente en todos. Las diferencias laborales siguen existiendo, las mujeres siguen cobrando menos y, en concreto en las empresas de medios de comunicación, la diferencia entre la presencia de hombres y mujeres es enorme. Carreras como Periodismo, Imagen o Publicidad se encuentran altamente feminizadas. Sin embargo, en la vida profesional las mujeres siguen teniendo muchísima dificultad para acceder a los puestos de trabajo. Todavía lo vemos representado en las tertulias de televisión, en los telediarios de quiénes hablan en las noticias normalmente.
¿Cómo se pueden erradicar los micromachismos y estereotipos de género que aún existen en nuestra sociedad?
A base de educación, no hay otra manera, y a base de que los Estados tienen que intervenir arbitrando una cantidad de medidas que son enormes que tienen que ver con la educación, con el acceso al trabajo, con la ayuda a la crianza de los hijos,…etc. Por ejemplo, el error de los políticos es que suelen programar acciones a cuatro años vistas porque son los que esperan gobernar, como la violencia de género que no se va a erradicar en cuatro años. En el caso de la violencia de género y crear una sociedad igualitaria requiere unos planes que son más a largo plazo, requiere hacer las cosas que empiezan con la educación y terminan en los ámbitos de trabajo y, por lo menos, necesitaremos una o dos generaciones para que esta situación se equilibre de verdad.
Se debe mantener la igualdad en el ámbito laboral, en el ámbito público, en el ámbito político,…etc. La educación es fundamental y que se vayan cambiando los contenidos porque todavía sigue siendo tremendo que, por mucho que se ha hecho en España, las autoras de literatura no aparecen, la Historia que se cuenta es la de los hombres, es decir, hay que ir cambiando las cosas y dar una presencia a las mujeres, tanto en la Historia como en lo que se espera de este mundo. En este sentido hay que ser feminista porque un futuro igualitario es un futuro donde no existirá esa tensión social, donde no existirá la violencia, puede haber un mundo más justo. El feminismo no trabaja por el bien egoísta de las mujeres, sino por conseguir la igualdad.
Instituto de Investigaciones Feminista de la UCM
Como directora del Instituto de Investigaciones Feministas de la Universidad Complutense de Madrid, ¿qué herramientas ofrecen para que los y las jóvenes se interesen por los estudios feministas?
Básicamente lo que hacemos es investigación y, ahora mismo, ofrecemos formación. Tenemos, por ejemplo, un Título Propio de Violencia, un programa de Doctorado de estudios feministas y de género, ofrecemos formación en máster y también de cursos. También tenemos una revista académica y una edición editorial. Además de la investigación, esta formación permite tener más presencia de jóvenes. Al final todo en lo que trabajamos tiene sus consecuencias en la gente joven que también están en sus propias asociaciones, en sus propias militancias y, sobre todo, en sus propios trabajos.
¿Cuáles son las actividades que INSTIFEM tiene programadas para su agenda 2016?
Ahora va a comenzar el Curso de Teoría Feminista. También tenemos una conferencia de Christine Delphy que es una clásica y teórica del feminismo francés muy importante que vendrá en abril. En noviembre celebramos el congreso Noviembre Feminista en relación con el doctorado y, de momento, es lo que tenemos programado.